Dicen que a todas las mujeres les encanta ir de compras, salir de tienda en tienda, probarse miles de prendas que no van a comprar y gastar sus ahorros en ropa de la cual no se pondrá la mitad. ¡¡Qué incierta es esta afirmación!!, desde luego que habrá chicas así al igual que habrá chicos con esa misma afición y chicas que simplemente odien escuchar a sus madres o amigas, “vente de compra con nosotras”… Yo, soy una chica, y no estoy ni en un extremo ni en otro. Ir de compras no es mi pasatiempo favorito, pero si necesito ropa y tengo que ir, voy a comprar lo justo y necesario.
Y ¿Por qué digo todo esto?, el planteamiento me surgió ayer cuando fui de compras. Dejamos el verano y el otoño pasa a ser la nueva estación, el frio poco a poco se va instaurando entre los días y como es habitual en esta época del año, hay que ir empezando a sacar del armario los pantalones largos. Eso hice yo el otro día, una recopilación de pantalones largos para ver cuales podría ponerme durante este nuevo curso. Cuál fue mi sorpresa cuando dos de ellos estaban a punto de romperse y en total tenía 5 pantalones para ponerme. Era hora de ir de compras.
Os voy contar algo sobre mi, mi estilo de vestir no es nada extravagante pero tampoco me gusta ir como todo el mundo, me conformo con la ropa de las grandes empresas textiles y la combino a mi manera para crear mi propio estilo, pero con unas condiciones: Pantalones anchos. Odio que los pantalones se ciñan a las piernas y no me dejen casi ni moverme. En cuanto a talla, nunca he considerado que esté gorda, una 40, o 42, depende del fabricante, supuestamente una talla bastante normalita y no debería tener muchos problemas para encontrar ropa. Pero…
Ayer salí de compras y volví a casa muy decepcionada.
Como se que en todas las tiendas no traen pantalones anchos comencé por una que a veces (solo a veces) trae alguno, fui a Kiabi, que muchos conocerán. Al entrar tenían en stock muchíiisimos pantalones, de todos los colores. Los estuve viendo poco a poco y llegué a una conclusión. El mismo patrón con distintas telas, les ponen bolsillos diferentes y ya pueden vender una infinidad de vaqueros distintos. No me convencía ninguno pero me probé la talla más grande que encontré, la 42, tenía suerte ¡¡mi talla!!. Voy al probador, me pongo el pantalón y cuál es mi sorpresa cuando casi ni me entra. No porque necesite una talla más sino que todos son de corte estrecho. -¡¡Vámonos de aquí!!- Le dije a mi novio un poco decepcionada. (Sabía que si aquí no lo encontraba en otra tienda iba a ser difícil.)
Me fui a la calle de las tiendas, esa que tienen todas las ciudades; donde hay un Berska, un Pull and Bear, está Zara, In Side…. y empecé una por una a entrar en ellas. Entré en Berska, repleto de gente hasta los topes y como dicen por ahí, con ganas de echarte un cubata al entrar, me dispuse a mirar pantalones. Todos de talle estrecho (¿Para qué variar?)… Vi uno que me gustó y ya casi convencida que tendría que ponerme algo ajustadito, comencé a buscar mi talla. La mayor, la 38… (sin comentarios), me probé la única 40 que encontré entre los pantalones colindantes y…. no os sorprendáis, si casi no me puedo mover con él…
Vamos de tienda en tienda a cada cual peor y con los mismos resultados. Tenía la esperanza de entrar en Inside y encontrar algo diferente (que suele haberlo) pero este no fue el caso…
Conclusión: Me vine a casa sin pantalones y un poco deprimida. No voy a consentir pensar que estoy gorda, porque no es cierto, pero ¿Cómo puede pasar esto? ¿De verdad esas tallas se venden , existen chicas que porten una 34?!!! ¿Soy yo la única que tengo estos problemas?, sinceramente lo dudo y ellos me hace pensar aún más.
Me resulta tremendamente complicado encontrar pantalones, la mitad de los que tengo los he comprado fuera de mi ciudad y en extrañas circunstancias (por pura casualidad). Me dicen que para pantalones anchos vaya a tiendas de hip-hop pero unos por exceso y otros por defecto, en estas tiendas no tienen mi talla porque todas son muuuuucho mayores.
En fin, escuché una noticia que decía que las asociaciones se quejan de, precisamente, este tema y que en Cibeles expulsaron a una chica por tener la talla 40 (Barbaridades de la moda) y he querido aportar mi experiencia a la red porque estoy muy cansada de no encontrar ni un pantalón que me quede bien.
Y vosotros ¿Compartís esta experiencia?
